En homenaje a la poeta y dramaturga Elizabeth Schön y a su esposo Alfredo Cortina, fotógrafo y hombre de radio, escribe el periodista José Pulido unas líneas recordando el nacimiento de la poeta el 30 de noviembre de 1921. Desde el Archivo Fotografía Urbana reproducimos lo publicado por el escritor en sus redes este martes
La fotografía, por supuesto, es de Alfredo Cortina. Nosotros tuvimos una gran amistad con Elizabeth Schön. Ella respaldó de un modo muy concreto y generoso mi escritura. Hoy sigo agradecido. Y añorando su voz.
ELIZABETH
Veías a Elizabeth Schön y la amabas. Leías sus poemas y la amabas. Era inevitable. Ella parecía restarle importancia a la materia, a lo pesado de la vida, la parte densa de moverse sin tener noción hacia dónde. Lo cierto es que todo a su alrededor se convertía en suavidad, en masa de luz, en espacios libres de obstáculos y eso facilitaba el acercamiento y la libertad de sentir. El día que se conocieron, Alfredo Cortina le dijo “eres mi novia” y ella no respondió nada, pero observó con cierta curiosidad aquellos ojos verdes. Porque el asunto que consta a quienes Elizabeth les narró todo el hechizo, es que Alfredo se quedó abrumadoramente deslumbrado con la silenciosa criatura que durante el resto de su existencia fue su musa, el centro de su amor y su almendra familiar.
Post original publicado en el Facebook del autor y publicado el 01 de diciembre de 2020.