Caracas, Venezuela, 1952.
Hijo del escritor y fotógrafo Alfredo Armas Alfonzo, Ricardo Armas nació en Caracas el 23 de noviembre de 1952. Siguió de cerca los pasos de su padre, incitado a la profesión por los reconocidos Sebastián Garrido y Luis Brito. Desde 1962 comienza a experimentar con el paisaje y algunos retratos familiares, así como autorretratos.
Publica sus primeros trabajos en las revistas Escena y Libros al día; luego, en El Nacional, El Universal y en las revistas M (Corimón), Imagen y Crisis. A finales de la década de los 70 se une a los fotógrafos Vladimir Sersa, Luis Brito, Alexis Pérez-Luna, Jorge Vall y Fermín Valladares en la conformación de El Grupo, un movimiento dedicado a presentar una mirada crítica sobre la situación social de Venezuela. En 1977 realizan la colectiva A gozar la realidad en Librerías del Sur, en Caracas; y en 1979, publican Letreros que se ven con la editorial del Ateneo de Caracas.
Entre 1975 y 1978 Armas continúa profesionalmente en la fotografía de danza. Trabajó para el Ballet Internacional de Caracas. También dirigió el departamento de fotografía en la recién formada Galería de Arte Nacional hasta 1977. En el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas consiguió armar un importante registro de personalidades del arte y la cultura venezolana.
En 1979 viaja a Estados Unidos para estudiar cine, pero se interesa por entender mejor el proceso fotográfico y aprovecha del movimiento que comenzaba a darse en aquella ciudad para profundizar en la fotografía artística, más allá del documentalismo. Realiza el Programa de Estudios Generales en el International Center of Photography entre 1980 y 1983. Durante esta etapa Armas desarrolla la serie «Cuadernos de Nueva York» como una mirada íntima del paisaje urbano neoyorquino. Experimenta con las técnicas del calotipo y el cianotipo, además de cámaras de gran formato. El resultado: fotografías de la ciudad, alejadas de la imagen documental, pero en sí mismas un registro urbano. En 1989 realiza la serie «Surtidos», en la que experimenta con las formas geométricas a través de los planos, con mosaicos y con sobreimpresiones como técnicas de revelado en el laboratorio.
Realiza su primera exhibición individual –Venezuela, 84 fotografías- en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas (MACC) en 1976 y al año siguiente se publica en el fotolibro del mismo nombre. Expone Imágenes de Ricardo Armas (La Fototeca, 1977), Ricardo Armas. Fotografías (El Daguerrotipo, 1986), Calotipos (Sala Mendoza, 1982), Unexpected Landscapes (Consulado de Venezuela, Nueva York, 1996), Rostrum. Ricardo Armas. 1972-2004 (Sala TAC, 2004), entre otras. Participa en la Bienal Nacional de Arte de Guayana (1992) y recibe Mención de honor en la Tercera Bienal de Artes Visuales Christian Dior en 1993. Participa también en numerosas colectivas. Destacan Hecho en Venezuela (MACC, 1978), Fotografía latinoamericana (Kunsthaus, Zurich, Suiza, 1981), Primera muestra de fotografía venezolana (MBA, 1982), Los venezolanos (The Photographers Gallery, Londres, 1981), Seis fotógrafos venezolanos (Oxford University, 1986), Los 80. Panorama de las Artes Visuales en Venezuela (GAN, 1990), Ten Contemporary Venezuelan Photographers: De-centering Visions (Dubois Gallery, Lehigh University, Pensilvania, 1998).
Luego de su regreso a Caracas, en 1983, Armas se inicia en la docencia. Dicta cursos de fotografía en el Instituto de Diseño de Caracas, invitado por John Lange. Sin embargo, Armas sentía la necesidad de crear un espacio dedicado exclusivamente a la formación de fotógrafos, ya que, para la época, no existían en Venezuela más que cursos breves y técnicos, dictados por el Conac o Avecofa. A partir de este anhelo organiza -dentro de su empresa personal- Manoa Arte y Fotografía, un espacio de enseñanza particular que funcionaba en la planta alta de una quinta que había pertenecido a Mariano Picón Salas, quien le dio el nombre.
Desde 1985 Armas dictó talleres de fotografía todos los martes y jueves en tres niveles –básico, medio y avanzado–, siguiendo un criterio basado en lo que él mismo había experimentado. Su objetivo era el de identificar la voz de cada fotógrafo. Entre los alumnos resaltan nombres como Ramón Lepage, Alexander Apóstol, Andrés Manner, Beatriz Grau, Amalia Caputo, Mauricio Donelli, y quienes fueron sus asistentes, Ricardo Alcaide, Sara Maneiro y Reinaldo Armas. Además, contó con importantes fotógrafos invitados como Luis Brito y Nelson Garrido.
En 1996 Armas decide volver a Nueva York para seguir desarrollando su propia obra. Desde la ciudad norteamericana, donde reside en la actualidad, continúa sus investigaciones y enseña en el Pratt Institute, en Brooklyn. En 1994 recibe el Premio Eladio Alemán Sucre en el LII Salón Arturo Michelena y -en 1997- es reconocido con el Premio Nacional de Fotografía en Venezuela. En 2016 la editorial La Cueva publica un libro antológico sobre su obra.
Sobre la obra de Armas escribió Isaac Chocrón: “Atrapa un instante de cada persona cual si no se hubiesen dado cuenta de que la cámara de Armas le ha descubierto un gesto o una mirada que los convierte en personajes” («La nueva fotografía en Venezuela”, Revista M, 1981).
El Archivo Fotografía Urbana conserva en su colección una serie de retratos realizados en Caracas, así como una selección de copias en papel de varias de sus series fotográficas.